viernes, 13 de diciembre de 2013

OPERACIÓN Y MANTENIMIENTO DE LOS SISTEMAS

De manera general se puede plantear que los sistemas de disposición planteados requieren muy poca o casi ninguna atención en su operación y mantenimiento, siempre que el tanque séptico reciba adecuada atención periódica. Los sistemas de infiltración subsuperficial, una vez construidos, no son conflictivos en su operación \ mantenimiento, siempre que el efluente esté suficientemente libre de sólidos sediméntales, grasas y aceites, por lo cual, el tiempo de vida útil de los sistemas puede ser prolongado. Un reciente informe sobre la evaluación de algunas instalaciones de tratamiento de disposición en el sur de Kentucky (USA) señala que cuatro sistemas de zanjas de infiltración estaban operando satisfactoriamente al cabo de siete años de construidas y a las que no les había dado ningún mantenimiento. Las recomendaciones que hacen para las zanjas y lechos de infiltración se reducen a dar periodos de recuperación prolongados (6 a 12 meses) a las superficies de infiltración para favorecer la reducción de la capa adherida por la degradación de !a materia inorgánica. El reposo de partes del sistema permite recuperar parte de la capacidad de absorción del suelo, para ello se ha diseñado el área de un I SO % de la requerida, que permite tener siempre un 50 % del sistema en reposo.
En ocasiones, el sistema, de zanjas o lechos puede presentar fallos que se manifiesten por afloramiento esporádico del agua, aunque pueda producirse la contaminación del manto freático sin que se noten manifestaciones externas de problemas. Las causas de fallos ocasionales de las zanjas o lechos pude deberse a la localización deficiente, mantenimiento inadecuado del séptico, o sobrecarga hidráulica del sistema. Sin embargo, pueden presentarse fallos continuos del sistema producido por insuficiencia del sistema por incremento del caudal a evacuar, que se supera con la adicción de nuevas áreas de infiltración; en otros casos, puede ser debido a construcción deficiente del sistema o alteraciones del subsuelo durante la construcción, que puede atenuarse aplicando la carga hidráulica por dosis en lugar de mantener la distribución por gravedad, y en última instancia, mediante ta reconstrucción de los tramos afectados o sustitución de estos por nuevas áreas de infiltración. Si el sistema «cumula muchos años de servicio antes de mostrar un fallo, hay que buscar las causas de este en posible sobrecargas hidráulicas, falta de mantenimiento del tanque séptico o por cambios en las características del agua, tales como incremento en el contenido de sólidos suspendidos y grasas.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario